¿Por qué el micromoldeo es ideal para piezas y productos médicos?

La fabricación de productos médicos abarca una amplia gama de dispositivos utilizados en la práctica médica, desde herramientas quirúrgicas hasta equipos de prueba y contenedores de almacenamiento de productos farmacéuticos. Como resultado, las herramientas médicas utilizadas deben ser pequeñas y refinadas. Por tanto, el micromoldeado se utiliza ampliamente en la fabricación de equipos médicos como catéteres, componentes ópticos y de audífonos, dispositivos de administración de fármacos, etc., y es especialmente útil para instrumentos utilizados en procedimientos mínimamente invasivos. A continuación se enumeran las razones por las que el micromoldeo es adecuado para la fabricación de dispositivos médicos. Optimización de costes: el micromoldeado de plástico médico ayuda a reducir costes innecesarios. Aunque la herramienta de moldeo tiene un coste inicial elevado frente a otras técnicas de producción, el molde sólo necesita fabricarse una vez. Se reemplaza después de cientos de miles de ejecuciones, y será más fácil y menos costoso de replicar. Precisión: Sin duda, el ámbito de la medicina en su conjunto requiere una enorme precisión en la mayoría de los procedimientos, sin lugar a errores o desviaciones. El micromoldeo tiene un alto nivel de exactitud y precisión. Debido al estrecho margen de tolerancia, cada pulgada, milímetro o centímetro afecta el desarrollo general del moldeado. Esterilización: Los materiales utilizados en este método de fabricación son resistentes a la invasión de contaminantes. Tampoco requieren mucha higiene para permanecer libres de gérmenes. Los dispositivos médicos que utilizan esta tecnología son biocompatibles, no contaminados y fáciles de usar y aplicar. Durabilidad: Las piezas médicas micromoldeadas de plástico son extremadamente robustas y pueden soportar las altas temperaturas requeridas para la esterilización en autoclaves. Estos materiales son duros y resistentes a ambientes y usos hostiles. Los productos fabricados pueden tolerar el calor, la fuerza y ​​la vibración sin agrietarse ni romperse, lo que los hace adecuados para fines médicos.